1. Aumenta la cantidad de fruta de tu dieta: Tomar al menos 3 piezas de fruta al día es imprescindible. Si la intención es mejorar el tránsito intestinal se recomienda tomar la fruta con piel y evitar los zumos.
2. No olvides las hortalizas y las verduras: La presencia de hortalizas o verduras de cualquier tipo en cada una de las comidas principales es muy importante. Como en el caso anterior siempre es mejor tomarlas con piel (no pelar los tomates antes de añadirlos a la ensalada, hacer cocinar el calabacín con piel en pistos y cremas ) y hacer mayor consumo de las que son ricas en fibra.
3. Asegura una ración de cereales integrales o pan integral en todos los desayunos: Es importante tener en cuenta que el pan usado en el resto de las tomas del día (media mañana, comida, merienda y cena) debe ser también integral.
4. Bebe dos litros de agua al día repartiéndolos de forma cómoda para evitar olvidos: Podemos asegurar un vaso de agua en cada una de las 5 comidas del día y 3 infusiones, como por ejemplo un té en el desayuno, una rica infusión de anís tras la comida y una infusión relajante como la melisa tras la cena.
5. Consume yogures de forma habitual: Los yogures contienen bacterias vivas que ayudan a repoblar nuestro intestino de bacterias beneficiosas y con ello, regulan el tránsito eficientemente si en la dieta hay presencia de fibra. El yogur puede considerarse por tanto un probiótico natural. Es bueno tomar al menos un par de yogures al día bien en el desayuno, como postre o entre horas.
6. Haz ejercicio físico con regularidad: Es muy beneficioso para el tránsito ya que ayuda al intestino a movilizarse.
7. Evita los laxantes, incluidos los naturales: En ocasiones, pensamos que las plantas al ser naturales son inofensivas pero sus principios activos son fuertes y pueden descompensar el funcionamiento de nuestro cuerpo con cierta facilidad. Algunos como el sen o la cáscara sagrada crean una gran dependencia, no es conveniente hacer uso de ellos porque en seguida el intestino se acomodará a esa ayuda externa.
8. Ordena tus horarios para ir al baño: En las personas estreñidas educar a su intestino es una tarea tan importante como las anteriores y bastará con elegir un momento del día y ser constante. ¡Un truco! Al comer se desencadena el llamado reflejo gastrocólico y éste, lo que hace es aumentar los movimientos del colón tras las comidas al aumentar el volumen del estómago. Este es un momento ideal para ir al baño.