El aceite de oliva virgen además de ser en sí mismo una delicatesen española, es un producto mínimamente procesado que aporta grandes beneficios a nuestra salud, por lo que debe ser la grasa predominante de nuestra dieta.
Tan solo 2 cucharadas al día aportan casi el 90% de las grasas monoinsaturadas y el 20% de la vitamina E necesaria para la jornada. Esto es simplemente una prueba de su importancia en la alimentación, pero veremos a continuación todos los beneficios que el aceite de oliva trae consigo:
- Reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular Su consumo diario, debido a su contenido de ácido oleico, consigue regular los niveles de colesterol en sangre y minimizar así los riesgos asociados. Actúa reduciendo el colesterol malo [LDL] y aumentando el bueno [HDL]. Contiene vitamina E, un potente antioxidante, que se encargará de la prevención de enfermedades cardiovasculares.
- Previene el envejecimiento celular Su contenido en antioxidantes naturales como los polifenoles y la vitamina E se encargan de ralentizar los procesos de envejecimiento celular. Notarás sus beneficios por dentro y por fuera. Su poder antioxidante consigue reducir el riesgo de enfermedades crónicas como algunos tipos de cáncer.
- Regula el sistema inmune y modera las reacciones inflamatorias.
- Regula los niveles de azúcar en sangre Consigue mejorar la utilización celular de la glucosa, disminuyendo así los requerimientos de insulina.
- Previene patologías digestivas Es capaz de reducir la acidez gástrica y tiene efectos beneficiosos sobre las secreciones digestivas al ser un potente estimulador de la colecistokinina.