Hoy os traemos una alternativa para acompañar y dar sabor a esos pequeños aperitivos, apto para dieta (siempre y cuando se consuma con moderación) y una muy buena alternativa para aquellas personas vegetarianas, con algún tipo de alergia o intolerancia al huevo, o para los que simplemente no les guste dicho alimento... ¡La veganesa!
Últimamente se ha puesto de moda la llamada veganesa, también conocida como la mayonesa vegetal, e incluso como sojanesa. Se trata de una salsa tipo mayonesa, obtenida con ingredientes vegetales, que sustituye el huevo, por leche de soja u otra bebida vegetal.
¿Cómo se hace la veganesa?
Lo primero, como en cualquier receta, necesitamos saber qué ingredientes necesitamos:
- Leche de soja.
- Aceite de girasol
- Salsa de mostaza
- Zumo de limón
- Sal
Una vez listos, ponemos en la batidora leche de soja (medio vaso), sal, una cucharadita de mostaza y batimos. Sin dejar de batir, añadimos aceite de girasol muy poco a poco, echando casi gota a gota hasta haber vertido en la batidora un total de medio vaso. Sin dejar de batir en ningún momento, añadimos un par de cucharaditas de zumo de limón, o si lo prefieres, vinagre.
Ahora, bien tenemos que tener en cuenta varios aspectos para personalizar la mezcla:
TEXTURA
El hecho de que la salsa quede más o menos espesa, va a depender de la cantidad de aceite de girasol que añadas a la emulsión, así que este punto es importante para aquellos que quieren vigilar el aporte de grasa, y por tanto kcal a su dieta. Recordamos que la grasa, independientemente de su procedencia, siempre va a aportar 9 kcal por gramo, y en el caso del aceite, como comentamos en este post sobre los mitos sobre el aceite, el pan y el agua, va a aportar 90-100 kcal por cucharada sopera.
Por el contrario, para conseguir una salsa veganesa más líquida, añade poco a poco más leche de soja.
SABOR
¡Para gustos los colores! Y es por eso, que se debe personalizar la salsa con los ingredientes que más nos gusten.
Si la mezcla sabe sosa, sin acidez, carente de sabor puedes añadir un poquito más de sal (cuidado con los hipertensos), zumo de limón, vinagre o ajo (diente o molido).
Otra muy buena opción, además de original, es condimentar la salsa con especias (perejil, cilantro, albahaca, romero, orégano ).
COLORES
Una idea muy atractiva, es jugar con los colores de la veganesa. Por ejemplo, si añadimos un poco de remolacha cocida mientras batimos la veganesa, tendremos una veganesa rosa (la intensidad variará en función de la cantidad de remolacha). Si buscamos un tono verde, podemos utilizar espinacas cocidas y aportará un sabor suave a la mezcla, y si preferimos colores cálidos, prueba a añadir un poco de zanahoria o calabaza cocida.
Recuerda que la alimentación siempre tiene que ser atractiva y enfocada en los gusto de cada uno, por lo que siempre que se consuma con moderación no hay ningún problema en condimentar ensaladas, acompañar entrantes o consumir como guarnición, este tipo de salsas.
¿Te animas a probar la veganesa? ;)